La opción de convertirse en una cooperativa de crédito que usufructúe su marca y su arraigo local se analiza en el seno de la entidad canaria P Otra alternativa pasa por buscar acuerdos con un banco
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| (Fuente: unsub20.blogspot.com) |
A. G. LAS PALMAS DE GRAN CANARIA Se trata solo del comienzo de un largo debate. Y obviamente no existe decisión alguna adoptada. De entrada, ni ha habido aún tiempo material. Pero La Caja de Canarias se ha propuesto ya un primer objetivo tras la nacionalización de Bankia: salvar la obra social. A corto plazo existe cierto margen. Pero ya ha comenzado a barajar escenarios para el medio plazo: Uno, retomar el negocio financiero con su marca comercial originaria, que nunca desapareció, convertida en una cooperativa de crédito apegada al negocio con clientes, el arraigo local y la pequeña y mediana dimensión (microcréditos, etc) como las que están en boga en el mundo. Otro, negociar el paraguas promotor de un banco.
En principio es exigida su reconversión en fundación para gestionar la obra social una vez perdida cierta cuota de control del banco del que formaba parte. Y ello implicaría perder su naturaleza de caja de ahorros. Pero en La Caja de Canarias indican, por un lado, que no se han establecido mecanismos automáticos para esa reconversión, y, por el otro, que en las ocasiones en que estas circunstancias se han producido [por ejemplo el de Banca Cívica, en el que se integró CajaCanarias, adquirida ahora por CaixaBank] no se ha dado el cambio y las entidades originarias han continuado como tales, con sus marcas y sus obras sociales. De modo que "hay margen legal de maniobra" para retomar la actividad financiera como cajas, salvar, por lo pronto, en lo posible la obra social y luego plantear otros retos.
En principio es exigida su reconversión en fundación para gestionar la obra social una vez perdida cierta cuota de control del banco del que formaba parte. Y ello implicaría perder su naturaleza de caja de ahorros. Pero en La Caja de Canarias indican, por un lado, que no se han establecido mecanismos automáticos para esa reconversión, y, por el otro, que en las ocasiones en que estas circunstancias se han producido [por ejemplo el de Banca Cívica, en el que se integró CajaCanarias, adquirida ahora por CaixaBank] no se ha dado el cambio y las entidades originarias han continuado como tales, con sus marcas y sus obras sociales. De modo que "hay margen legal de maniobra" para retomar la actividad financiera como cajas, salvar, por lo pronto, en lo posible la obra social y luego plantear otros retos.
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