Por Ger.
Web Ayunate.
Desconozco si estas técnicas vienen en algún manual que les dan a los reclutadores al salir de la universidad, pero al analizarlas, es probable que les haya tocado más de una vez vivir alguna experiencia como estas. El objetivo de un reclutador es obtener la máxima cantidad posible de información de tu persona y de tu comportamiento, para evaluar de qué manera te podés integrar a la organización.
Como en el mundo corporativo moderno la comodidad no es lo más habitual, los reclutadores más hábiles van a buscar ponerte en situaciones complicadas a propósito, para ver tus reacciones y las cosas que les decís. Anoten bien estos 8 trucos para la próximaentrevista de trabajo que tengan.
1. Quedarse callados después de que les contestaste una pregunta.
Este as lo tienen todos bajo la manga. La estrategia es súper simple, por eso suele ser altamente efectiva. Vos terminás de responder una pregunta, y el reclutador se queda mudo. ¿Qué está buscando? Que te pongas nervioso y sigas hablando. El 95% de las personas no es capaz de resistir estas pausas incómodas. Como te parece que esa pausa significa que está pensando algo malo de vos, empezás a decir cosas sin pensar. Estas espontaneidades le son de suma utilidad al reclutador para analizar tu verdadera forma de ser.
Ellos saben que preguntas tales como “¿cuál es tu mayor defecto?” son harto conocidas y que cada entrevistado ya tiene una respuesta preparada. Esos planes se van al tacho de la basura cuando el reclutador se queda mirándote en silencio. Si ya respondiste a la pregunta que te hicieron, lo mejor es quedarse sereno y esperar a la siguiente.
2. [...]
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