La Caixa ha desarrollado unas etiquetas que, colocadas en el reverso de un teléfono móvil, permitirán el pago sin contacto, "contactless", con este dispositivo en Barcelona.
En un comunicado, esta entidad financiera ha informado de que prevé que 200.000 clientes usen este sistema en febrero, coincidiendo con la celebración del Congreso Mundial de Móviles de 2013.
El sistema se basa en un adhesivo TAP, diseñado para transmitir datos de forma segura, que puede colocarse en el reverso de cualquier móvil y que incorpora un chip con la información necesaria para hacer un pago.
Así pues, cualquier usuario que incorpore esta etiqueta -denominada TAP Visa Contactless- a su móvil podrá pagar igual que con una tarjeta sin contacto: bastará con acercar el terminal a cualquier datáfono con un lector adaptado a esa tecnología.
En casos de transacción superior a 20 euros, el cliente tendrá que introducir su número secreto en el datáfono.
Aunque el sistema "contactless" no está aún muy extendido, ya hay más de 50.000 comercios en toda España con datáfonos adaptados a esta tecnología.
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